«Realizamos una curiosa actividad que ninguna otra persona parece capaz de hacer: cuando nuestros modos habituales de pensar fracasan, podemos ponernos a pensar sobre nuestros propios pensamientos» (Minsky, 2010, 11)

«En el fondo, nosotros, esos espejismos que se perciben a sí mismos y que se inventan a sí mismos, somos pequeños prodigios de la autorreferencia» (Hofstadter, 2014, 431)

«Uno habla solo porque uno no dice jamás sino una sola y misma cosa, salvo si uno se abre a dialogar con un psicoanalista (Lacan, 1988, 23)

Tal vez para descifrar objetos en un inconsciente que determina.

O para operar sin duplicar el funcionamiento de un inconsciente que interpreta.

Sino para saber hacer frente a un inconsciente que siempre equivoca.

«Puedo comenzar diciendo que el psicoanálisis no es hijo de la especulación sino el resultado de la experiencia» (Freud, 1991, 207).

«Por cierto, el psicoanálisis no es una cómoda panacea para el sufrimiento psíquico (…); al contrario, solo su aplicación permitió esclarecer las dificultades y los límites con que tropieza la terapia en esas afecciones» (Freud, 1992, 245).

«Hacía mucho tiempo que el concepto de lo inconsciente golpeaba a las puertas de la psicología para ser admitido. Filosofía y literatura jugaron con él harto a menudo, pero la ciencia no sabía emplearlo. El psicoanálisis se ha apoderado de este concepto, lo ha tomado en serio» (Freud, 1991, 279).

Jun/1975: «No hay despertar sino por ese goce desvalorizado por el hecho de que el análisis, al recurrir al sentido para resolverlo, no tenga ninguna otra posibilidad para lograrlo más que haciéndose incauto…del padre» (Lacan, 2012, 596).

Oct/1975: «Solo hay necesidad de saber que en ciertos seres, así llamados, el encuentro con su propia erección no es autoerótico en lo más mínimo. Es de lo más hétero que hay» (Lacan, 2010, 128).

May/1976: «La ruptura del ego libera la relación imaginaria, porque es fácil imaginar que lo imaginario se soltará, dado que sin duda el inconsciente se lo permite» (Lacan, 2006, 152).

«La palabra historia oscila entre dos polos: la historia que se cuenta (Historie) y la que ocurre (Geschichte)» (De Certeau, 2006, 273).

«Esta facultad de captar lo vivo es, en efecto, la cualidad dominante del historiador» (Bloch, 2012, 47).

«La historia es un discurso fundamental porque lo fundamental del sujeto se descifra del discurso de una historia: renegación de la muerte, goce de la materia» (García, 2005, 17).

«Sería maravilloso tener una teoría compacta y autosuficiente que explicara todas nuestras formas lingüísticas. Pero ese ideal no puede realizarse porque nuestras palabras no son más que los signos externos de procesos muy complejos, y no existe ningún límite claro entre el lenguaje y todo lo demás que denominamos pensamiento» (1987).

«Al final me di cuenta que no existía un camino óptimo. Cada método tenía sus ventajas en situaciones particulares. Es significa que la clave para construir una máquina inteligente es inventar la manera de administrar una variedad de recursos» (1995).

«A veces seremos capaces de diagnosticar errores específicos en esos diseños, y luego podremos remediarlos. Pero, cuando no logremos hallar el modo de hacer esas reparaciones, no nos quedarán muchas opciones, salvo la de añadir más comprobaciones y compensaciones. Sin embargo, nunca encontraremos un modo infalible para elegir, por ejemplo, entre las ventajas de emprender acciones inmediatas y las de pensar de manera más prudente y reflexiva» (2006).

Un signo de época: al fin las cosas podrán gobernar, «gobernarse ellas mismas y gobernar a los hombres».

«Heidegger ha aportado la explicación más profunda de por qué lo mejor y lo más digno es ser un seguidor».

Pero no tan rápido, hay, en principio, «razones de estado».

«Lo mental no es la mente».

«(…) es del lado de la escritura que se concentra aquello donde trato de interrogar acerca del inconsciente cuando digo que el inconsciente es algo en lo real» (Lacan, Versión Íntegra, 172).

«Lo mental: el Psicoanálisis en Córdoba».

El inconsciente está hecho de palabras.

El inconsciente está hecho de palabras que juegan.

El inconsciente está hecho de palabras que al jugar, afectan.